El contexto actual nos reta con su veloz dinámica y su demanda de inmediatez y productividad. Ante ello, es nuestra responsabilidad buscar la armonía de nuestro ser a través de la realización de prácticas simples que nos eviten enfermedades y por el contrario, nos lleven a la sanación. En este sentido, Ayurveda propone un diario de autocuidado llamado dynacharya.
La tendencia global, las empresas y el desequilibrio
Hoy en día las empresas no pueden conformarse con lo que las ha hecho exitosas. Permanentemente deben entender los mercados y las tendencias globales con el propósito de innovar de manera disruptiva.
Lo anterior expone a las personas, ya sean empleados o emprendedores, a presiones constantes de cambio y productividad. Por ende, a un ritmo acelerado y exigente. Este ha tendido a convertirse en la normalidad, lo que a generado que cierta parte de la humanidad no propicie ni desee la estabilidad, y más bien, se vuelva adicta al cambio.
Sumémosle a todo lo anterior la creación de la necesidad permanente de consumir lo que sea y de cualquier forma. De esta manera, perdemos la perspectiva de lo que es sano, coherente y sensato.
Este contexto nos desconecta de nosotros mismos y de la naturaleza, del ritmo real, de lo que debería ser lo normal.
Vata, el responsable del movimiento constante
Desde la perspectiva ayurvédica, los principales responsables de esta inestabilidad, el movimiento y la coordinación del pensamiento son vata y prana*. Vata es el dosha constituido por los elementos aire y éter, prana el dosha sutil relacionado con la fuerza de vata en la mente. El aumento exacerbado de estos doshas en general, se identifican como los responsables de la mayor cantidad de enfermedades en la actualidad.
Esto debido a que el exceso de movimiento hace que perdamos de vista los aspectos biológicos mas importantes, como los son; el dormir, el comer y el prepararnos para el día, restándole así, el nivel de importancia que ameritan.
Dinacharya, rituales ayurvédicos diarios
Dinacharya es el proceso mediante el cual conectamos con el ritmo de la vida diaria ideal. Estas prácticas nos enseñan cuáles son los hábitos más recomendadas para cada uno, y cómo su inserción como parte de una rutina, llevan a encontrar la calma y la salud física y mental.
Las rutinas diarias saludables permiten que germine en nuestro ser la armonía. De allí, el brillo y la luz que nos ayuda poco a poco a desarrollar el potencial divino y a realizarnos.
Las prácticas deben idealmente de ser tan personalizadas como lo es la combinación de todas nuestras características y cualidades. Sin embargo podemos enunciar una serie de prácticas que son las mínimas necesarias y que aplican a todo ser humano. Lo anterior debido a que somos seres vivientes, que hacemos parte del todo. En este sentido, la naturaleza ya nos indica y nos enseña cómo debemos entrar en sintonía con ella y por ende con nosotros mismos.
A continuación te indicamos algunas prácticas que puedes llegar a cabo como parte del dinacharya:
Responsabilízate de tu propio ser, ten tiempo para ti
Debemos estar dispuestos a reservar un tiempo personal e inamovible en pro de nuestra propia existencia. Siempre habrán razones para ceder nuestro espacio. Procura no hacerlo.
1. El sueño y el descanso
¿A qué hora se acuestan la mayoría de los seres vivientes del planeta? La luz artificial es un invento de los últimos 140 años. En su momento, el fuego no lograba entregarle a la noche el entretenimiento que hoy en día se acostumbra. Es entonces, que podemos concluir que en esencia el hombre debe conectarse con la luz y los movimientos del sol y por ende dormir cuando hay ausencia de luz.
Ayurveda invita a dormir máximo a las 10 p.m. para obtener la recuperación y el rejuvenecimiento requerido en las horas de la noche. Esto le permite al cuerpo, a sus funciones y al descanso, el protagonismo requerido.
2. La rutina de la mañana
En las horas de la mañana privilegiamos “dormir más tiempo” a tener una rutina saludable en cuanto a la conexión con nuestro despertar, la limpieza, el desayuno, entre otros. Lo anterior nos lleva a una carrera contra el tiempo y a encender el piloto automático. Consecuentemente, consumirá nuestra energía mucho más rápido.
Deberíamos dormir entre 7 y 8 horas diarias. Si conectamos con la hora a la que nos acostamos, el despertar debería ser antes o con la salida del sol. Esto es entre las 5 y 6 de la mañana.
Otras practicas que te invitamos a incorporar:
- Evacuación intestinal: También lo entendemos como un proceso de limpieza de toxinas del organismo. Para esto puedes tomar un vaso con agua tibia con unas gotas de limón en ayunas.
- Limpieza de dientes y lengua: Junto con el lavado de dientes, se utiliza un raspador de lengua para extraer la capa que se encuentra encima de la lengua, ayudando así a eliminar las toxinas del cuerpo.
- Limpieza de los conductos nasales: Se utiliza para su realización, una vasija llamada Neti llenándola con agua a la temperatura del cuerpo y 1/4 de cdita de sal marina. Se lava la nariz a través de las dos fosas nasales, permitiendo que el agua fluya sin esfuerzo de un orificio al otro. Este proceso también permite extraer las toxinas que provienen del aire y mejora la capacidad de respiración.
- Meditación: Se realiza cualquier prácticas según su biotipo/dosha, todos los días entre 10 y 30 minutos.
- Yoga: Ayurveda sugiere practicar posturas de yoga de acuerdo con su dosha por mínimo 30 minutos.
- Automasaje y baño corporal: Dése un masaje todos los días con el aceite indicado según su dosha. A través de esta práctica, no solo nutrimos nuestro cuerpo (muy recomendado para desequilibrios vata y pitta), sino que además nos regalamos amor. Este se aplica calentando un poco de aceite de calidad (orgánico y prensado en frío), vertiéndolo en las manos y esparciéndolo por el cuerpo. Luego lo dejamos absorber por lo menos durante 10 minutos. Posterior a esto tomamos un baño de agua caliente sin aplicar jabón. Ver el artículo La importancia de usar el automasaje como rutina de cuidado personal.
3. Las comidas del día
Las recomendaciones alrededor de la comida están muy orientadas a la constitución y el desequilibrio actual de cada persona. Sin embargo puedes seguir de manera genera las siguientes pautas según tu biotopo:
- Vata: Comer 5 veces al día en pequeñas porciones y a la misma hora todos los días.
- Pitta: Comer 3 veces al día, en porciones más grandes y a la misma hora todos los días.
- Kapha: Comer solo 2 veces al día (un brunch y una cena) que no sea de un tamaño muy grande.
En general se recomienda desayunar antes de las 8 am. El almuerzo tomarlo cerca al medio día, que es cuando el fuego digestivo se conecta con el sol y se fortalece. Y la cena, preferentemente antes de que anochezca. Para casos especiales, máximo a las 7 de la noche. Esto con el objetivo de que la comida se digiera mínimo 3 horas antes de dormir.
Para profundizar en el acto de comer, se puede visitar el artículo ¿Qué es alimentarse saludablemente?
Un camino que requiere motivación y disciplina
Instaurar nuevos hábitos no es fácil. De hecho, tendremos la tendencia a rechazarlos y volver a nuestros hábitos anteriores. A veces seremos capaces de lograrlo por nuestra propia cuenta, a veces necesitaremos que alguien nos acompañe. A veces nos pondremos retos tan altos que lo único que generarán es que muy pronto desistamos de ellos.
Nuestra invitación es que nos motivemos con el efecto que esto provocará en nosotros, empezando con pocas cosas a la vez. Ademas es necesario que identifiquemos el impacto que crea en nosotros y continuemos el camino sin desistir, con lo cual poco a poco iremos observando la transformación y el bienestar tan profundo que generado.